martes, 14 de febrero de 2012

El juego en sociedad


El juego es un punto muy importante, ya que demostrará como reaccionamos en sociedad, como ha sido nuestra educación. Recuerda que el amor propio, en ocasiones, nos puede provocar perder los papeles, perder el control y quedar mal ante la gente. El hombre debe ser capaz de dominarse, ante la sociedad, en todo momento. En ocasiones, el amor propio nos crear una venda, delante de los ojos, que no nos deja diferenciar entre la razón y el deber, y cuando nos calmamos, o sea, cuando logramos quitarnos la venda, ya es muy tarde y estamos avergonzados por lo que hayamos hecho. El juego sólo es eso, un juego, un conjunto de demostraciones, con el que las personas demuestran que se lo están pasando bien, sin más. El que juega debe aparentar, en todo momento, una calma inalterable, que no sea una alegría pueril cuando está ganado, ni un ridículo despecho, si la suerte no le sonríe. Cuando decidimos jugar, debemos tener en mente que es posible que perdamos y no nos debe sorprender, ni enfadar, si acabamos perdiendo. En ocasiones, nos encontramos con personas que juegan con mucha algarabía y contento, por que están ganando; mientras que, otras, están tristes o enfadadas, porque van perdiendo. O, incluso, personas que son tan mezquinas que alternan los sentimientos de tristeza o de alegría, dependiendo de si la suerte les sonríe o les da la espalda.
Foto: fuente

No hay comentarios:

Publicar un comentario