Usar un esmoquín, en una ocasión especial, puede ser una gran opción, ya que te va a ayudar a poder lucirte radiante, en todo momento. Eso sí, debes tener cierto cuidado, ya que es muy fácil sobrecargar en exceso tu imagen; salvo que tengas claros cuales son los conceptos que quieres transmitir -y, por supuesto, si el ambiente que te rodea, te lo va a permitir-, ya que, en ocasiones, las excentricidades, en el caso del hombre, pueden quedar ridículas, pueden dar al traste con todo el trabajo anterior. Es cierto que en el mercado se pueden encontrar camisas de colorines, ceñidas, brillantes y con pajaritas psicodélicas; pero, sin duda, la sobriedad y la elegancia van a ser las mejores opciones, sobre todo, si tienes dudas de que tienes que lucir o poner en cada momento. Si optas por esta elección, sin duda, vas a lucir impecable. Una prenda básica es una camisa blanca, lo más correcto es llevar una con cuello Wing u opera, pero no se verá nada mal, si decides usar un cuello de vestir, eso sí, entonces, tendrás que llevar unos gemelos en los puños. Recuerda que el esmoquín no se puede llevar con cinturón, ni con cosas con charol o con grandes hebillas. Estamos hablando de una prenda que está destinada a ser usada con tirantes, que deben ser lo más elegantes y sobrios posibles, para lograr una elegancia 100%.
Foto: fuente
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